Septiembre. Una editora neoyorquina se retira a una solitaria cabaña, en la colina de una tranquila ciudad costera: Dead River, en temporada baja, donde espera la llegada de su hermana y amigos. Cerca, una familia de caníbales salvajes está al acecho en el sombrío bosque que la rodea, observando y esperando que salga la luna y caiga la noche…
Y en pocas horas, cinco personas civilizadas y sofisticadas, así como un viejo y cansado sheriff aprenderán cuán primitivo somos debajo de la superficie, y que no existen límites ante el deseo de sobrevivir.
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B R U T A L
Y es que Jack Ketchum no deja a nadie indiferente con sus novelas, su forma de la descripción de la crueldad y mostrar el salvaje instinto de supervivencia que cualquiera de nosotros estaría sometido para seguir con vida, hace que sus lecturas se tornen tan reales como escalofriantes y terroríficas.
Una lectura que te atrapa desde el primer momento, ya sea con la familiaridad y soltura del escritor o por las terroríficas tramas en las que el lector se ve envuelto.
Los personajes, son un ramillete de diferentes personalidades, todos completamente individuales y complejas personalidades. La narración en ligera y centrada en la acción y en la descripción del horror, donde es el único tramo descriptivo que utiliza es para situar a los personajes en horrendas situaciones y a los que estamos sosteniendo el libro estar en el centro de la historia.
Con pocos momentos de tranquilidad y suspiro, los capítulos se suceden como olas, no dejan de ocurrir salvajadas, no dejan a los que luchan por su vida sin un minuto de respiro, y eso hace, que tanto lector como historia, se desenfrene pasando paginas.
Y que cada capítulo sea la hora en la que suceden los hechos de forma cronológica, sin saltarse ni días ni momentos, hace que la velocidad y la sensación de continuidad, sumerjan aún más a lector y personajes en ese pozo de agonía.
Es cierto, que al ser una versión sin demasiada censura del original, no ahorra en detalles macabros, bestiales, brutales y vomitivos en más de una ocasión, y esto se nota, vaya si se nota!
En más de una ocasión paré de leer y tomar aire para asimilar lo que acaba de pasar o estaba pasando y has cortado la lectura porque no puedes continuar, es demasiado extremo para seguir… pero no te demoras más de 30s en retomarlo porque precisamente, no puedes dejarlo.
Entiendo que este salvaje slasher? impactara en su momento de publicación en los 80, estando censurado en su mayoría, porque si publica lo que he leído… este autor estaría pudriéndose en la cárcel por algún grupo religioso/politico/padres/etc..
La difícil descripción de los ambientes y los olores lo clava, encuentra la fórmula para impregnarnos de esa pestilencia y desagrado que envuelve a los salvajes, así como la oscuridad del bosque o la humedad de la cueva.
Y el final!?!?!?!?!
QUÉ PEDAZO DE C*BR*N!!! Cómo nos hace, cómo les hace eso?!?!?!
Pura genialidad.
Entiendo, que al igual que La Chica De Al Lado, no es una lectura apta para cualquier lector, que incluso los experimentados, hemos sentido vertigo y saltado líneas de puro terror por la salvaje y cruel descripción de las cosas a las que les sometían los salvajes a sus pobres víctimas.
